Sobre el PSUV...

Quisiera comentar brevemente el discurso del Presidente Chávez al referirse el pasado sábado a la conformación del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).

Una de las cosas más significativas del discurso sabatino fue la diferencia establecida por el Primer Mandatario entre un partido de multitudes y un partido de masas, y su opinión contundente de que el PSUV deberá ser un partido de multitudes.

Cuanta claridad ideologica.

Mientras el partido de masas no diferencia entre las diferentes posturas, criterios, críticas, que hay entre los seres humanos, las multitudes tienen como base grupos de intereses diversos, cuadros políticos que, sin embargo, obedecen estratégicamente a grandes líneas de acción.

Un partido de multitudes es un partido heterogéneo y, sin duda alguna, cónsono con la democracia participativa y protagónica establecida constitucionalmente.

Tal partido, necesariamente, debe tener eficacia política y calidad revolucionaria.

Por otra parte, resulta importante destacar que el Presidente esta muy consciente que el proceso revolucionario no ha terminado con el viejo orden de cosas.

Al mejor estilo gramsciano, señalo que en la actualidad estamos en una crisis histórica, donde lo viejo no termina de morir y lo nuevo, no termina de nacer.

El proceso revolucionario, para ser tal, debe ir transformando las relaciones de producción vigentes para sustituirlas por las nuevas, socialistas.

Este es un proceso arduo y que requiere compromiso y claridad estratégica, en lo político, en lo económico y en lo social, pues estos tres aspectos de la realidad son inseparables.

El Presidente tuvo el coraje de reconocer que la revolución no esta aun consolidada. "Si yo muero, la revolución podría desnaturalizarse y hasta morir", señaló

En la transitoriedad que nos caracteriza a los humanos, sólo un partido capaz de generar las ideas y los liderazgos para ejecutar, en el largo plazo, el proyecto político socialista, puede consolidar la revolución que se haría permanente y transformadora.

El Presidente Chavez insto a todos los patriotas revolucionarios a que se conviertan en pensadores, en creadores, en filósofos, en fin, en intelectuales orgánicos de la revolución, que aporten ideas a la creación del nuevo sistema social, político y económico.

¿Cómo pueden llamar Tirano a un hombre con esta claridad ideológica y estratégica, con este sentido de la democracia y con el respeto a la diversidad que tiene el Presidente Hugo Chávez Frías?

Intereses mezquinos, únicamente, pueden llamarlo así.