El ministro de la Defensa Colombiano, Juan Manuel Santos, al anunciar la muerte del guerrillero, Raúl Reyes.Algunos medios de comunicacion han especulado que Venezuela ha roto sus relaciones con Colombia, al retirar nuestro Embajador y toda la misión diplomática venezolana de Bogota, como solidaridad contra las acciones colombianas que vulneraron gravemente la soberanía ecuatoriana, ejecutadas por el Gobierno belicista de Alvaro Uribe Velez.
A los que me leen: Venezuela no ha roto, aun, sus relaciones con Colombia.
Para romper relaciones, es necesario notificar a la otra parte, Colombia, mediante una declaración expresa del ciudadano Presidente de la República, Hugo Chavez, sobre dicho rompimiento, tal cual lo hizo el Presidente Correa en el caso de su país.
Sin embargo, ordenar el retiro de nuestra misión diplomática, y ordenar el retiro del Embajador de Colombia, pudiera ser calificado, sin duda alguna, como el punto mas bajo de la relación bilateral de nuestros países y el posible preámbulo a un rompimiento.
El rompimiento de relaciones diplomáticas no implica, necesariamente, el cese de las relaciones comerciales. Tomemos como ejemplo las acciones del Presidente ecuatoriano, para explicar este punto: el Presidente Correa dijo expresamente que dichas relaciones no se verán interrumpidas como consecuencia del cese de las relaciones diplomáticas entre ambos países.
Sin embargo, el establecimiento de nuevos negocios e inversiones por la intermediacion de los Estados es muy difícil.
Cuando uno lee las declaraciones recientes emanadas de nuestros altos funcionarios, por ejemplo, Elias Jaua, puede deducir que no necesariamente se encuentran afectadas las relaciones comerciales, pero, si es necesario, "Venezuela está preparada para aportar soluciones en caso de que ocurran situaciones adversas en el comercio bilateral de bienes y servicios con Colombia".
http://www.prensalatina.com.mx/Article.asp?ID=%7BCF9D17A3-928A-4118-B828-E984C9F4F42C%7D&language=ES
Venezuela viene tomando acciones desde hace algún tiempo para diversificar su oferta importadora, de modo que somos hoy menos dependientes del mercado exportador colombiano, lo cual se convierte en una fortaleza en caso de que las relaciones comerciales se vean interrumpidas en el futuro.
Respecto al tema de la restricción del acceso de las gandolas colombianas hacia nuestro país, ello obedece al cierre de la frontera con Colombia.
Una cosa debemos tener muy claras los venezolanos, y lo digo porque observo con preocupacion como la oposición vuelve a adueñarse de la información real, distorsionándola, para defender sus intereses de clase sin miramiento alguno hacia los de la Patria: Venezuela preve movilizar contingentes militares hacia la frontera con Colombia por razones defensivas y no agresivas hacia el vecino país.
Después de la agresión contra la soberanía territorial del Ecuador, tomando en cuenta la presencia militar norteamericana en Colombia, el expediente diplomática que represento el secuestro de Rodrigo Granda, el anuncio verdaderamente esquizofrenico del Vicepresidente de Colombia respecto a llevarse al Alcalde de Maracaibo, Di Martino, entre muchos otros detalles, es mas que obvio que nuestro país tiene razones para ejercer su derecho a la legitima defensa, en el sentido tradicional que esta tiene y no en el sentido que la usa hoy día Colombia, que asocia el concepto de la legitima defensa con la acción preventiva en perfecta consonancia con lo que pudiéramos llamar "doctrina Bush".
Romper relaciones no implica, necesariamente, un estado de confrontación pre bélica. Allí tenemos a Chile y Bolivia, que no sostienen relaciones diplomáticas y no tienen un estado bélico entre ellos.
En el caso nuestro, la situación pre bélica estaría planteada solo en el caso que establece el articulo 51 de la Carta de las Naciones Unidas:"Ninguna disposición de esta Carta menoscabará el derecho inmanente de legítima defensa, individual o colectiva, en caso de ataque armado contra un Miembro de las Naciones Unidas (...) " Es decir, Colombia tendría que atacarnos primero.
La acción de Venezuela de movilizar tropas dentro de nuestras fronteras es una acción legitima de Derecho Internacional, legitima en el ejercicio de nuestra soberanía, y se trata de una acción disuasiva. Informes de inteligencia, ya comentados en su columna por José Vicente Rangel, señalan que el Gobierno colombiano ha movilizando primero sus contingentes muy cerca de la frontera con nuestro país.
A esos tres millones de compatriotas latinoamericanos, procedentes de Colombia, que viven en nuestro pais, es bueno que sepan que no les pasara nada, en caso de un eventual conflicto con Colombia. Ellos gozan y gozaran siempre de todos sus derechos humanos, garantizados por nuestra Constitucion, porque un eventual conflicto armado con el vecino pais, Venezuela tiene muy claro que los civiles no tienen nada que ver con el mismo.
Los conflictos armados entre naciones no deben involucrar a civiles, allí están las Convenciones de Ginebra y sus protocolos, y Venezuela respeta todos sus compromisos internacionales. Nuestro país no es un país guerrerista a la sombra de un Imperio que poco mira el Derecho Internacional a la hora de actuar.
Por el contrario, Venezuela es un auspiciante activista del Derecho Internacional Humanitario, y como prueba de ello, tenemos su participación en el rescate de las victimas de secuestro por parte de las FARC.
A los que me leen: Venezuela no ha roto, aun, sus relaciones con Colombia.
Para romper relaciones, es necesario notificar a la otra parte, Colombia, mediante una declaración expresa del ciudadano Presidente de la República, Hugo Chavez, sobre dicho rompimiento, tal cual lo hizo el Presidente Correa en el caso de su país.
Sin embargo, ordenar el retiro de nuestra misión diplomática, y ordenar el retiro del Embajador de Colombia, pudiera ser calificado, sin duda alguna, como el punto mas bajo de la relación bilateral de nuestros países y el posible preámbulo a un rompimiento.
El rompimiento de relaciones diplomáticas no implica, necesariamente, el cese de las relaciones comerciales. Tomemos como ejemplo las acciones del Presidente ecuatoriano, para explicar este punto: el Presidente Correa dijo expresamente que dichas relaciones no se verán interrumpidas como consecuencia del cese de las relaciones diplomáticas entre ambos países.
Sin embargo, el establecimiento de nuevos negocios e inversiones por la intermediacion de los Estados es muy difícil.
Cuando uno lee las declaraciones recientes emanadas de nuestros altos funcionarios, por ejemplo, Elias Jaua, puede deducir que no necesariamente se encuentran afectadas las relaciones comerciales, pero, si es necesario, "Venezuela está preparada para aportar soluciones en caso de que ocurran situaciones adversas en el comercio bilateral de bienes y servicios con Colombia".
http://www.prensalatina.com.mx/Article.asp?ID=%7BCF9D17A3-928A-4118-B828-E984C9F4F42C%7D&language=ES
Venezuela viene tomando acciones desde hace algún tiempo para diversificar su oferta importadora, de modo que somos hoy menos dependientes del mercado exportador colombiano, lo cual se convierte en una fortaleza en caso de que las relaciones comerciales se vean interrumpidas en el futuro.
Respecto al tema de la restricción del acceso de las gandolas colombianas hacia nuestro país, ello obedece al cierre de la frontera con Colombia.
Una cosa debemos tener muy claras los venezolanos, y lo digo porque observo con preocupacion como la oposición vuelve a adueñarse de la información real, distorsionándola, para defender sus intereses de clase sin miramiento alguno hacia los de la Patria: Venezuela preve movilizar contingentes militares hacia la frontera con Colombia por razones defensivas y no agresivas hacia el vecino país.
Después de la agresión contra la soberanía territorial del Ecuador, tomando en cuenta la presencia militar norteamericana en Colombia, el expediente diplomática que represento el secuestro de Rodrigo Granda, el anuncio verdaderamente esquizofrenico del Vicepresidente de Colombia respecto a llevarse al Alcalde de Maracaibo, Di Martino, entre muchos otros detalles, es mas que obvio que nuestro país tiene razones para ejercer su derecho a la legitima defensa, en el sentido tradicional que esta tiene y no en el sentido que la usa hoy día Colombia, que asocia el concepto de la legitima defensa con la acción preventiva en perfecta consonancia con lo que pudiéramos llamar "doctrina Bush".
Romper relaciones no implica, necesariamente, un estado de confrontación pre bélica. Allí tenemos a Chile y Bolivia, que no sostienen relaciones diplomáticas y no tienen un estado bélico entre ellos.
En el caso nuestro, la situación pre bélica estaría planteada solo en el caso que establece el articulo 51 de la Carta de las Naciones Unidas:"Ninguna disposición de esta Carta menoscabará el derecho inmanente de legítima defensa, individual o colectiva, en caso de ataque armado contra un Miembro de las Naciones Unidas (...) " Es decir, Colombia tendría que atacarnos primero.
La acción de Venezuela de movilizar tropas dentro de nuestras fronteras es una acción legitima de Derecho Internacional, legitima en el ejercicio de nuestra soberanía, y se trata de una acción disuasiva. Informes de inteligencia, ya comentados en su columna por José Vicente Rangel, señalan que el Gobierno colombiano ha movilizando primero sus contingentes muy cerca de la frontera con nuestro país.
A esos tres millones de compatriotas latinoamericanos, procedentes de Colombia, que viven en nuestro pais, es bueno que sepan que no les pasara nada, en caso de un eventual conflicto con Colombia. Ellos gozan y gozaran siempre de todos sus derechos humanos, garantizados por nuestra Constitucion, porque un eventual conflicto armado con el vecino pais, Venezuela tiene muy claro que los civiles no tienen nada que ver con el mismo.
Los conflictos armados entre naciones no deben involucrar a civiles, allí están las Convenciones de Ginebra y sus protocolos, y Venezuela respeta todos sus compromisos internacionales. Nuestro país no es un país guerrerista a la sombra de un Imperio que poco mira el Derecho Internacional a la hora de actuar.
Por el contrario, Venezuela es un auspiciante activista del Derecho Internacional Humanitario, y como prueba de ello, tenemos su participación en el rescate de las victimas de secuestro por parte de las FARC.
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