miércoles, 27 de junio de 2007

Sobre Facundo Cabral...


En lo personal, no entiendo por qué para ser brillantes, intelectualmente capaces, ser sensibles y poseedores de la impresionante cualidad de ser "omnicomprensivos", se deba recurrir permanentemente a un sentido trágico y aburrido de la vida.

Honestamente, pese a no ser de habla castellana, encuentro más disfrute personal leyendo a Whitman, a Rabindranath Tagore y a Kahlil Gibran, o en nuestra lengua, a Andrés Eloy Blanco, Gabriela Mistral y a Pablo Neruda, que oyendo a alguien que permanentemente nos narra sus difíciles experiencias e increible capacidad de recuperacion mediante el recurso a encontrar belleza en lo trágico de la vida.

No es que no sea meritorio o no sea hermoso lo que narra Cabral en sus canciones.

Lo que pasa es que encuentro increíble que alguien logre hacer de la tristeza, la depresión y hasta del cinismo un producto artesanal, es decir,algo que puede producirse una y otra vez como objeto decorativo.

No sé.

Como dijo Lennon alguna vez, me parecen admirables los artesanos, pero me inclino a los artistas.

A mi me parece increible que tantas personas vayan, una y otra vez, a maravillarse con los permanentes relatos adoloridos y las recuperaciones emocionales casi misticas que supuestamente se dan en un instante fugaz.

Me parece increible que guste tanto alguien cuyo discurso raya casi en lo maníaco depresivo.

Y no es que piense que la tristeza, el dolor, la angustia no tengan sentido poético, no. Sí lo tienen.

Sino que ver lo poético sólo en eso....una y otra vez...no de vez en cuando, sino una y otra vez...me parece...uffff....ESPELUZNANTE!!

Por eso es que digo que, de Cabral, lo único que me gusta es aquéllo donde canta a las pequeñas cosas de la vida....y me gusta lo mismo que me gusta "My favorite things" de la Novicia Rebelde

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